Hoy os quiero compartir una historia muy bella, de esas mágicas que suceden en Zinnia, como os contaba el otro día hemos estado trabajando entre muchas propuestas y recursos durante el curso, con el soporte de libro de artista, nos hemos acercado a la obra de Jacinto Lara «Les lavandierès après», hubo una niña en nuestra taller que resonó con la obra, y quiso brindar un homenaje a su madre también, elaborando un libro de artista. A su manera, a su estilo, ella utiliza los colores que le recuerdan a su mamá… hasta aquí todo «natural», la sorpresa fue cuando dos semanas después se presentó su mamá con un vestido con los colores que Marina había seleccionado para su libro de artista, nada le contó por supuesto a su mamá, y fue la sorpresa de esas que pueden pasar desapercibidas.
Este es un ejemplo más, que muestra como los recursos artísticos son un medio de expresión para l@s niñ@s, que no hacemos manualidades en Zinnia, que el acompañamiento a las artes plásticas en la infancia es necesario hacerlo de manera profesional, observando cada detalle. Porque es aquí donde surgen estas delicias de una delicadeza y trasfondo hermoso, donde l@s niñ@s encuentran su espacio para poder expresar y florecer todo lo bello que portan.
Realmente puede parecer increíble, mágicas las conexiones que pueden llegar hacer y que bello cuando lo pueden expresar de una manera tan bella, tan cuidada… hoy lo comparto porque doy gracias por poder ver, porque la magia está a diario, pero como decía el principito a veces «lo esencial es invisible a los ojos».
En estos días de verano andad antent@s que seguro mucha magia saldrá de la mano de l@s más pequeñ@s.
Qué maravilla! Vanessa. «No hacemos manualidades» eso es evidente. Qué necesarios tu taller y tu mirada.
Gracias Fuensanta por tus bonitas palabras, que viniendo de tí que conoces el desarrollo y necesidades autenticas de la infancia, es todo un alago. Mil gracias. Un abrazo!