Durante estas semanas hemos estado trabajando el escudo personal.
Entendemos el escudo como un conjunto de símbolos que hablan de la identidad de un equipo, de una familia, de un grupo de personas… o en este caso, de un@ mism@.
Partiendo de esta base, la realización de esta actividad a través de la mirada introspectiva de cada individu@ tiene como finalidad última el autoconocimiento y el ejercicio de búsqueda de nuestras fortalezas.
Adaptado siempre a cada período evolutivo, es una actividad que invita a nuestr@s niñ@s a preguntarse sobre ell@s mism@s: quiénes son, de qué se sienten orgullos@s, qué l@s hace únic@s, qué les gustaría ser, o qué les hace sentirse segur@s y felices.
Identificarnos no sólo nos ayuda a conocernos mejor, sino que ayuda al desarrollo de la autoestima. A través del arte, de lo visual, vamos a explicar aspectos de nuestra personalidad que a veces nos puede costar explicar con palabras. Vamos a reflexionar también sobre cómo creemos que nos ven los demás porque, la mirada del otro, sobre todo, de la de nuestros referentes, influye en la imagen que tenemos de nosotr@s mism@s.
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